Emoción.
Ese conjunto de letras, que en una sola palabra encierra un torrente de sensaciones, una riada de sentimientos, anhelos y pasiones que hoy en día mueven el mundo.
El festejo popular.
Bastión de la emoción perdida en la gran mayoría de cosos de nuestra piel de toro. Calles, plazas y rastrojos plenos de ojos ávidos de sensaciones fuertes. Viajeros que peregrinan su afición de villa en villa congregándose en paredes, tejados, vehículos, talanqueras y acotados para contemplar cómo un puñado de hombres se juega la vida sin ambages, de poder a poder, a cuerpo limpio frente a las frías guadañas del toro bravo. Un manojo de jóvenes que anhela sentir el aliento del burel rozando su espalda, los pitones acariciando sus muslos, el roce fugaz del morrillo en su antebrazo o esas miradas que hielan la sangre cuando el cuatreño hace estremecerse el suelo arrancándose al galope en pos de su presa. Hombres que portan en sus venas el veneno del toro, esa droga de la que nunca podrán desintoxicarse.
El festejo popular no sigue regla alguna, la libertad es total, cada cual expresa sus sentimientos frente al toro creando su propia obra de arte para el recuerdo; derrochando adrenalina en un binomio perfecto. Pezuña y zapatilla, pitón y cintura, rodador y toro… ambos entregando lo más preciado de su existencia, su vida en cada arrancada. Cada envite constituye una fugaz estela con aroma de lucha que se pierde en la noche de los tiempos, el hombre y la fiera indómita. Hombres plenos de amor sincero por el animal más bello de la creación, pasión irrefrenable por el toro bravo, forma de vida para unos pocos locos enamorados.
La verdadera esencia de la tauromaquia: un hombre sorteando a la animalidad de la muerte, sirviéndose tan sólo de la inteligencia humana.
Miles de devotos se congregan cada día alrededor de un pequeño pueblo que en sus fiestas incluye un festejo popular taurino. Cantera de afición desde tiempos inmemoriales.
Hoy y siempre DesdeLaAficiónAlToroBravo nos declaramos aficionados y protectores del festejo popular, de todas y cada una de las expresiones de la tauromaquia.
Sirva este puñado de instantáneas como tributo al trabajo que realizan unos enamorados del toro y el festejo popular en la villa ducal de Alba de Tormes, Salamanca. Asociación Taurina Cultural 15 de Octubre, Cosme, Alberto… nuestra más sincera enhorabuena amigos.
Texto: Adrián Pérez Pérez
4 Comments
Una pluma excelsa,un sincero sentimiento,un gran respeto a nuestro Toro,un olor a campo bravo,una emoción contenida,pero…no puedo mas:escribes de Puta madre….
Muchísimas gracias por tus palabras Alberto, esta es nuestra humilde manera de devolver al Toro lo que él nos da, escribiendo y haciendo fotos tal y como sale de nuestro corazón. Nos alegra llegar a tantos y tan buenos aficionados como tú, es nuestro objetivo. Un fortísimo abrazo, ganadero. Nos vemos muy pronto.
Muy buen articulo, muy recomendable! Saludos.
Muchas gracias Alma! Un saludo desde el Campo Charro.